Desde ATEPSA hay voluntad de construir una agenda a largo plazo, que contemple el estudio serio y maduro de las condiciones y medio ambiente de trabajo de todo el personal comprendido en nuestro CCT, en aspectos tales como fatiga y edad jubilatoria. Esto requiere un desarrollo de las relaciones de trabajo, que a la fecha no se ha alcanzado, y además poder superar los problemas graves que presenta el encasillamiento de personal que se encuentra impugnado. De la EANA depende demostrar que “no es más de lo mismo”, a un colectivo de trabajo que históricamente ha sido vapuleado y disputado por intereses de todo tipo, y mayoritariamente lejos del interés de l@s trabajador@s.
Hay una agenda inmediata y urgente que comprende a un grupo de compañer@s que están en la 4ª fase y que a la fecha no han sido encasillados, porque no están cumplimiento una función operativa –en general pérdida habilitación por problemas con el psicofísico- y que por no alcanzar la edad y/o aportes no pueden acceder a la jubilación. Entendemos que este es el grupo prioritario para pensar en un plan de retiro anticipado.
Ahora bien, toda propuesta de mejora para l@s trabajador@s, cualquiera sea la situación en la que se encuentren, debe garantizar el principio de igualdad de oportunidades y trato. El plan de jubilación anticipada debe basarse sobre criterios objetivos que no generen diferencias negativas respecto de aquellos que están en condiciones de jubilarse por haber alcanzado los requisitos.
La posición de ATEPSA sobre el tema ha sido planteada en la nota que aquí se publica.
